El mundo del arte nos ha malacostumbrado a un tipo de eventos que desde mi punto de vista no tienen nada de constructivo: los premios.
Son esas formas de tratar de dar un “reconocimiento” a una persona por su obra etiquetándola como la “mejor” dentro de una categoría establecida. Todos los años acudimos, por ejemplo, a premios tan importantes como los Oscar en el mundo del cine o los Grammy en el de la música. La literatura no se queda atrás y mucho menos cuando de novela romántica se trata. En este mundillo se han establecido diversos premios para galardonar autores y obras.
Desde mi punto de vista es un poco humillante que te digan que hay una obra que es mejor y otra que es “no mejor” (o sea buena pero no tanto). Considero que cada obra es única y en ese sentido no puede ni debe ser comparada con otras, es como decir que Juana es mejor persona que María; así como los seres humanos somos distintos y no podemos ser mejores o peores que nadie, las obras también lo son.
Pero bueno, no es eso lo que me ocupa en estos momentos.
De lo que quiero hablar es de otra cosa.
Suponiendo que los premios literarios en realidad otorgan el título de ser “mejor” en algo, me genera una enorme duda que es la que quiero manifestar aquí. Dicha duda se genera a partir de un acontecimiento que quiero relatarles.
Hace algún tiempo, recibí en mi correo electrónico (no en el de autora sino en el de lectora) un mensaje de una escritora que decía más o menos algo así:
“Mi novela 0000000 está nominada en la categoría de mejor 0000000 para los premios 0000000, vota por mi yendo al link 0000000”.
Cuando por curiosidad ingrese a la página del premio, mostraba distintas categorías y cierto número de autores y obras nominadas. Decía que, para elegir a la mejor, se debía votar por una de ellas y daba en términos generales las instrucciones para votar por la favorita y con ello cooperar para que ganara el premio.
En ese momento fue cuando me asaltaron diversas dudas:
¿Quién elige cuáles serán las autoras nominadas en cada categoría y bajo qué criterios? Créanme que mire en todas partes del sitio y en ninguna parte se decía.
¿Cuáles son los criterios a partir de los cuales las lectoras hacen su votación? Por supuesto, tampoco lo decía.
¿Cómo verifican que en realidad todas las votantes han leído todas las novelas para poder emitir un juicio certero? No lo decía, y sinceramente no creo que exista una manera de medir eso.
Cuando uno ve un concurso como, por ejemplo, el de Miss Universe, te das cuenta que los jurados tienen unos criterios sobre los cuales evalúan a las candidatas: el cuerpo, el rostro, la inteligencia, el carisma, la elegancia, etc. De otro lado, es evidente que los jurados están frente a todas las concursantes, las conocen a todas y por lo tanto pueden emitir un juicio a partir de lo que observan y lo que perciben. ¿Cómo se hace eso en un concurso literario?
Vuelvo al mensaje que recibí de esta autora. Más parece que está haciendo campaña electoral y no intentando que los demás vean el valor estético de su obra. Otra cosa habría sido decir “lee mi novela 000000 y si te gusta, te pido que votes por ella en el concurso 000000”.
El caso es que yo, que soy la más irreverente de Las Irreverentes, y me gusta halarle los bigotes al tigre, le respondí a esta autora con un correo más o menos así:
“Te agradezco el mensaje, pero honestamente no he leído tu novela, y tampoco las otras contra las que compite, por lo tanto, no me parece correcto hacer una votación sobre lo que no conozco. Intentaré leer todas las obras involucradas y votaré por la que considere debe ganar el premio.”
La respuesta de la autora no se hizo esperar:
“Si no quieres votar, pues no votes, no necesito tu voto, tengo más de XXXX de fans y con su voto será suficiente, bla bla bla”
Los “bla” representan otras sandeces que no vienen al caso. Me pareció interesante ver que en ningún momento dijo que su obra era tan buena como para ganar, sino que basó su defensa en la cantidad de sus fans que sin duda votarían por ella a ojo cerrado.
A partir de lo que leí en la página del concurso y de la respuesta de la autora, yo me pregunto: ¿en realidad los premios los ganan las “mejores” obras, o las que tienen más fans que voten por ellas? Y es que considero que ser famoso no es sinónimo de ser talentoso. No siempre los más talentosos son los que consiguen fama.
Los concursos literarios presentados de esta manera parecen más una campaña electoral que un evento serio en el que se valore la estética de una obra. Lo que importa es el voto, como en política, no importa de dónde venga, lo importante es que venga. No importa las promesas o el contenido, no importa la cara del autor o el político, no importan las ideas, no importa si en realidad es el mejor, lo que importa son los votos, y al final nos sigue quedando la duda: ¿de verdad la que ganó fue la mejor, o la que más campaña electoral hizo?
Brenda,
ResponderEliminarCoincido plenamente. Sobre esto de los concursos hay mucho qué decir. Lo que has dicho es una de las grandes tristes realidades. Por ejemplo, que a las autopublicadas las ignoran por completo (o hacen una categoría de premios para ellas como si no fueran "tan autoras" como las que publican en editorial).
Es evidente que los premios no buscan reconocer el talento sino hacerle marketing a las supuestas nominadas y ganadoras para que después puedan presumirlo dentro de sus logros. No me extrañaría que hubiera grupos organizados de autoras dentro de esos concursos donde ellas solitas se nominan y ellas solitas se premian.
En fin, como dices, este es el mundillo literario.
Excelente entrada.
Abrazos.
Amiga MAry,
EliminarSí, lo que dices es una posibilidad del trasfondo de esto. Lo peor es que las lectoras no se dan cuenta de la manipulación a la que están siendo sometidas y participan de un juego que al final deja muchas premiadas que no se sabe si lo merezcan.
Besos.
Caray, limosnera y con garrote la vieja esa, cuando les conviene son buena gente cuando no sacan las uñas, un concurso literario debe de tener un jurado con gente especializada en la materia, que sea imparcial y profesional, no por votaciones que eso son simples nominaciones, es como un juego, el concurso lo debe de ganar por varios factores no por ser la más votada, en fin si se supone que hay editoriales de por medio (y dinero) debería haber seriedad, es un jurado compuesto de gente profesional quien emite el veredicto no por votaciones, el talento debe reconocerse no comprarse. Como dice Mary es una lástima que no se haga algo serio también para las autopublicadas, la discriminación está por todas partes.
ResponderEliminarMuy buena entrada, abrazos!!
Amiga Itxa,
EliminarEs verdad. Ya sabes que en el mundillo está esa clase de gente, como dice la canción "el amigo que es amigo, siempre y cuando le convenga". Y bueno, es poco probable que en el mundillo haya gente imparcial y sin intereses. De plano, no se deberían hacer concursos que al final solo alaban a una (que sabrá Dios si lo merece) y humillan a muchas. El arte no debe ser para humillar a nadie. pero como dices, hay plata de por medio, intereses y eso es lo que más se mueve dentro del mundillo.
Besos.
He visto cantidades de premios literarios realizados por blogs y otras páginas, cuyas nominadas son casi todas españolas, y las extranjeras, son estadounidenses. Y me pregunto: ¿Dónde están las autoras latinas? Hay muchas que son muy buenas y brillan por su ausencia.
ResponderEliminarHola Martha, gracias por estar aquí y comentar.
EliminarCoincido contigo, existen muchas escritoras latinas talentosas, pero como digo en el post, la cosa no es de talento sino de campaña electoral, de política, de influencias. No hay criterios claros en la nominación ni mucho menos en la elección, no se valora el talento, sino los votos que como en todo evento politico dependen de la publicidad y el carisma del candidato, pero no de las ideas, en este caso, no de la novela.
Besos.